Artículo: Sufrir un fraude no significa ser una persona tonta

El fraude es un delito al igual que lo es un robo o un asalto. En lugar de usar violencia, los estafadores recurren a mentiras y engaños. Las pérdidas pueden resultar en importantes traumas financieros y psicológicos, desde perder los ahorros de toda una vida y sufrir dificultades financieras, hasta provocar estrés, ansiedad, depresión y pensamientos suicidas. Para consultar los servicios de salud mental en su zona visite FindTreatment.gov.  

Es normal que las víctimas sientan vergüenza o se culpen a sí mismas. ¿Debí haberme dado cuenta de que la oferta era “demasiado buena para ser real”? ¿Cómo pude caer en esta estafa? Pero no tiene por qué tener este sentimiento. Muchas personas denuncian fraudes porque les aliviar tener una sensación de justicia aunque sepan que es posible que no recuperen su dinero. Otros denuncian fraudes porque saben que la información que brinden evitará victimizar a otras personas. 

Su mejor defensa es el conocimiento: saber reconocer y evitar fraudes y cómo minimizar los daños en caso de ser víctima. 

Cinco fraudes para reconocer

A continuación, se presentan fraudes frecuentes sobre los que usted debería saber más. Use los enlaces que siguen para aprender cómo funcionan estos fraudes, qué debe hacer y qué no, así como otros recursos. Además, puede visitar el Programa de denuncias de la CFTC para aprender más acerca sobre la autoridad de control de la CFTC.  

  • Fraudes de engaño financiero 
    Hay bandas delictivas internacionales que han estafado a ciudadanos estadounidenses por al menos $3 500 000 usando sofisticadas estafas en línea que atraen a las víctimas prometiendo relaciones románticas y riquezas. Los delincuentes contactan a las víctimas mediante mensajes de texto supuestamente realizadas “al número equivocado” o mediante perfiles falsos en las redes sociales/aplicaciones de citas, y luego pasan semanas o meses engañándolos fomentando su confianza y haciéndoles creer que han entablado una nueva relación personal. Con el tiempo, el estafador introduce la idea de que pueden obtener ganancias invirtiendo en criptomoneda o divisas fuera de bolsa. Es posible que la víctima gane dinero en la primera operación, pero, después el estafador le roba todo lo que puede y desaparece con el dinero de la víctima. Entre los defraudadores  esta estafa es conocida como “pig butchering” ("matanza de cerdos").  
  • Fraudes de activos digitales 
    Incluyen plataformas de comercio fraudulentas, estrategias de inflar y vender (pump-and-dump) y esquemas Ponzi. 
    • Fraudes en plataformas de comercio: Estos sitios suelen ofrecer “programas de inversión” que prometen enormes ganancias garantizadas. Pero realmente no existen transacciones que no impliquen riesgo ni oportunidades de inversión que garanticen ganar dinero. Todo se presenta muy bien, hasta que uno intenta retirar su dinero y se encuentra con tasas, impuestos, u otros obstáculos. 
    • Estrategias de inflar y vender: Los estafadores que inflan y venden usan plataformas sociales, aplicaciones de mensajería o tablones de anuncios en línea para promocionar fichas poco conocidas que ellos mismos controlan o pueden manipular con facilidad. Los estafadores comienzan por manipular el precio al alza. A medida que se suman más personas a la compra, el precio va aumentando. Cuando los precios de las fichas llegan a un tope alto (que sólo conocen los estafadores), los estafadores venden las fichas sin valor, entonces el precio cae, y todos los operadores se apresuran por salir, resultando en que  muchos de los clientes pierden todo. 
    • Esquemas Ponzi: Los esquemas Ponzi adoptan formas muy variadas, pero una de ellas implica que los estafadores solicitan dinero de sus clientes para invertir en activos digitales y en general prometen ganancias garantizadas. En lugar de invertir el dinero, el estafador lo roba y usa parte de esos fondos para pagar falsas “ganancias” a inversores anteriores, pero la mayor parte del dinero se usa para solventar el estilo de vida de lujo del estafador. 
  • Fraudes con divisas fuera de la bolsa: Los fraudes con mercado de divisas fuera de la bolsa también adoptan muchas formas, pero todas prometen grandes ganancias o niveles de “éxito”. Por lo general, estos fraudes se centran en una plataforma de comercio no registrada, alguien dispuesto a compartir sus señales de operación secretas, software que realiza las operaciones, o la oportunidad de operar con el dinero de una empresa operadora exclusiva y de “compartir” las ganancias. Generalmente, las víctimas que envían su dinero (con frecuencia activos en criptomoneda) lo pierden todo. 
  • Fraudes con metales preciosos: Estos fraudes prometen inversiones “seguras”, pero los precios inflados, las altas comisiones y las excesivas tasas constantes hacen imposible que las víctimas obtengan ganancia alguna. Los estafadores suelen dirigirse a inversores mayores y los convencen de renegociar sus pensiones de jubilación para pasarlas a cuentas de retiro individuales (IRA) autocontroladas e invertir en metales preciosos. 
  • Fraudes con impostores: En este caso, los estafadores se hacen pasar por funcionarios del gobierno, funcionarios de seguridad, multimillonarios, o celebridades que roban el dinero de víctimas desprevenidas. 

Solicitar ayuda

Puede ser útil denunciar sus sospechas de fraude ante organismos reguladores o de seguridad. Su información podría ser la pista necesaria en un caso que puede ayudadar a proteger a otras personas. Los datos proporcionados en las reclamaciones se analizan para identificar tendencias de fraudes en curso, mostrar el alcance y escala de estas tramas, para así alertar al público. Además, si usted proveyera una pista que resultara en una investigación exitosa, puede ser elegible para recibir del 10 % al 30 % del monto que recaude la CFTC mediante el Programa de denuncias de la CFTC.   

No obstante, denunciar un fraude no garantiza que esto dé lugar a una investigación o que usted recupere su dinero. Es muy difícil recuperar el dinero que se pierde en un fraude. Consulte los 6 pasos a seguir tras descubrir un fraude a fin de obtener más información. 

Denuncie ante entidades reguladoras

Las entidades reguladoras pueden levantar cargos civiles y presentar una demanda por sanciones que puedan ayudar a resarcir las pérdidas de las víctimas. El gobierno nunca le pedirá que pague para ocuparse de su caso o ayudar a que recupere lo que perdió. Según el producto, el mercado y la información involucrada, es posible que intervengan los siguientes organismos: 

Denuncie ante los organismos de seguridad

Cuando se trata de denunciar un fraude lo mejor que puede hacer es cubrir todos sus flancos: tanto autoridades locales, como estatales y federales. Estos organismos de seguridad pueden levantar cargos penales. Denuncie el fraude ante: 

Detalles que puede aportar

Si presenta una reclamamación, estos son algunos de los detalles que puede incluir para ayudar a los investigadores:

  • Cómo se contactaron con usted inicialmente (redes sociales, aplicaciones de citas, mensajes de texto “al número equivocado”, etc.).
  • El nombre y la información de contacto de la persona que se comunicó con usted.
  • La foto de la persona que se comunicó con usted. 
  • El nombre y la información de contacto de la empresa.
  • Si usted retiró $10.000 o más para invertir, el nombre y la dirección de su institución financiera.
  • El nombre, la dirección y la información de la cuenta bancaria a la que usted envió el dinero, si corresponde. 
  • Lo que le dijeron sobre la oferta (ganancias garantizadas, información privilegiada).
  • Monto total de lo que envió o perdió.
  • El tipo y el nombre de la aplicación de comercio.
  • La dirección del sitio de internet de comercio.
  • Si el fraude implicó activos digitales:
    • Si corresponde, el tipo de tarjeta de prepago que se usó o la ubicación del punto de intercambio de criptomonedas.
    • Los activos digitales o productos financieros que usted creía estar comerciando.
    • Nombre del centro de intercambio de la billetera digital desde la que se enviaron los fondos. 
    • Dirección pública de la billetera desde la que se enviaron los fondos.
    • Nombre del centro de intercambio de la billetera que recibió los fondos, si corresponde.
    • Dirección pública de la billetera que recibió los fondos.
    • Nombre de la transacción o identificación (txid).
    • Si recibió “ganancias”, la dirección pública de la billetera de envío.
    • Si recibió “ganancias”, el nombre del centro de intercambio de la billetera de envío.
  • Si el fraude implicó divisas extranjeras: 
    • Las divisas que comerció.
  • Si el fraude implicó metales preciosos:
    • Desde dónde se enviaron los metales.
    • Hacia dónde se enviaron.
    • El nombre y la dirección de la empresa IRA autocontrolada, si corresponde.
    • Los formularios de transferencia de IRA.
    • El nombre y el lugar del depósito donde se guardaban sus metales.
    • El tipo de metal adquirido.
    • Mencionar si le dijeron que las monedas tenían un valor coleccionable o “numismático”. Indicar este valor agregado.

Este artículo fue preparado por la Oficina de Educación y Compromiso con el Consumidor de la Comisión de Negociación de Futuros de Productos Básicos de Estados Unidos. Se proporciona sólo con fines de información general, no constituye una interpretación legal ni una declaración de la política de la Comisión, y no brinda asesoramiento legal o de inversiones a ninguna persona o entidad. Consulte con su asesor legal antes de adoptar cualquier medida basada en esta información. Este aviso alude a sitios y organizaciones ajenos a la CFTC. La CFTC no puede dar fe de la exactitud de la información presente en ninguna referencia ajena a la CFTC. Las referencias que se hagan en el presente artículo a cualquier organización o al uso de cualquier organización, comercio, empresa o razón comercial tiene fines informativos únicamente y no constituye una aprobación, una recomendación o una preferencia por parte de la CFTC.